El primero en exponer será la querella, la Unidad de Información Financiera (UIF), que se extenderá además por dos jornadas más. Los 13 juzgados, entre ellos Cristina Kirchner, deberán conectarse para presenciar las audiencias.
Los alegatos de la UIF demandarán tres audiencias y habrá que ver si pedirá una condena para la vice o su absolución.
Luego será el turno del fiscal de juicio Diego Luciani, a quien se le concedieron nueve audiencias para exponer, por lo cual su alegato terminará después de la feria judicial de invierno que empieza el 18 de julio próximo.
Por su parte, la Oficina Anticorrupción (OA) desistió de alegar tras dejar su rol de querella en en caso, por lo cual luego de las dos partes acusadoras será el turno de los abogados defensores.
La presencia de la vicepresidenta, Cristina Kirchner, no será en los tribunales de Comodoro Py, sino por videoconferencia, la modalidad en la que se desarrolla el juicio. Es que, salvo que pidan ser exceptuados de esta obligación, los 13 juzgados deberán conectarse para presenciar las audiencias.
Entre ellos, está la vicepresidenta, Cristina Kirchner, quien al declarar negó su responsabilidad en el caso y sostuvo que “fue un plan ideado por el Gobierno saliente” de Mauricio Macri y “forma parte del lawfare”.
El resto de los acusados son el empresario, Lázaro Báez; Julio De Vido, exministro de Planificación Federal; José López, exsecretario de Obras Públicas; Abel Fatala, subsecretario de Obras Públicas; Carlos Kirchner, extitular de la Subsecretaría de Coordinación de Obra Pública Federal y primo del expresidente Néstor Kirchner; Nelson Periotti, extitular de la Dirección Nacional de Vialidad; Raúl Daruich y Mauricio Collareda, exjefes del distrito Santa Cruz de la Dirección Nacional de Vialidad; y Héctor Garro, Juan Carlos Villafañe, Raúl Pavesi y José Santibañez, todos ex presidentes de la Administración General de Vialidad de Santa Cruz.
La acusación es por los delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta.