Si les digo que esto es culpa del gobierno actual porque propició la desinversión ustedes van a decir que yo soy K. Pero si yo les digo que esto es responsabilidad de la herencia recibida, muchos pueden decir que apoyo al presidente, Javier Milei. Ambas posiciones acotan el debate e impiden la objetividad de la información, que es la función del periodismo.
Tanto como sucedió con la tragedia de Once o con los accidentes de Lapa hay una tendencia encontrar la causa en la falla humana. En este tipo de estragos siempre se le echa la culpa a quien conduce la nave.
El choque de trenes en Palermo tiene un antecedente en el 2021 cuando una locomotora colisionó con un tren de pasajeros que se encontraba detenido por una falla técnica que le impidió continuar la marcha 750 metros después de su salida de la estación de Palermo.
En ese momento, la justicia identificó como causa del suceso las discrepancias en las comunicaciones: el tren que tenía que brindar auxilio a la formación detenida recibió la ubicación por tres vías diferentes, y en cada una de ellas la información era distinta.
En el accidente sucedido el viernes se está analizando, la falla humana, un error en las comunicaciones, si existió un robo de cables y la falta de señalización.
Hace 10 días están los trenes sin señales ya que al haber existido un robo de cables no funciona la señalización. A esto se suma la desinversión. Estaba previsto un financiamiento del BID por 500 millones de dólares. El martes pasado fue prorrogada por otros 90 días, por la decisión de postergar toda obra no iniciada.
¿Decir esto es decir que se está en contra de Milei? Creo que el presidente no le está dando apoyo a la obra pública incluso, cuando se trata de cuestiones de vida o muerte. Pero si les digo que estaba obra estaba preparada para ser adjudicada en el final del gobierno de Alberto Fernández, en este punto me convierto también en una crítica del gobierno anterior.
Acá no es una falla de uno u otro gobierno. En este caso se equivocaron todos. No hay grieta. El gobierno de Alberto Fernández no dio lugar a la inversión, a la prevención y no dio curso a una licitación del BID que ya estaba autorizada. Tampoco lo hizo el gobierno actual. Ustedes saquen sus propias conclusiones.
